miércoles, 31 de octubre de 2018

31. Siglo XX. Actualidad

31. Siglo XX. Actualidad

Los alcaldes, dentro de la penuria de medios, se esforzaron en dotar al pueblo de servicios. En los años cincuenta se hizo la traída de aguas desde la Noguer, y se puso el agua potable y el alcantarillado y el teléfono en los domicilios.

Sobre 1960, cuando Argelia obtuvo la independencia, regresaron al pueblo muchos de los que habían emigrado a Argelia. En los años sesenta, con la apertura del Régimen, la llegada del turismo y la mejora económica, se empezó a vivir mejor y se modernizaron las costumbres. Alrededor de 1960, se asfaltó la carretera. Alrededor de 1964, llegó la televisión, lo que supuso una “revolución” en el pueblo. Aumentó la cultura, se uniformaron las modas y el sistema de vida. También se perdieron las viejas tradiciones, aunque, en verdad, nos alegramos de que algunas hayan desaparecido. Aparecieron los primeros coches utilitarios, se pavimentaron y se arreglaron las calles y las casas, y llegaron los electrodomésticos a las casas, y también el plástico.

El bienestar de los sesenta también supuso que otros pensaran en irse a otros sitios a ganar más dinero. La emigración, que siempre había existido, fue masiva desde el año 60 al setentaytantos. Unos fueron a Francia, muchos a Valencia, a Alcoy, a Denia, a Javea, a Benisa, a Altea, a Benidorm y sobre todo a Alicante capital. La población de Famorca disminuyó estrepitosamente. Los pueblos se quedaron sin jóvenes. En cualquier fábrica, o en la costa, se ganaba más dinero que trabajando en el campo. Los campos se fueron abandonando y desaparecieron antiguos oficios.

Llegó el turismo masivo y varias familias, sobre todo inglesas, vinieron a vivir al pueblo durante todo el año.

Con la democracia cambiaron las costumbres radicalmente, y los estilos de vida, especialmente los de las mujeres y los de los jóvenes. Se comenzó a consumir mucho más, a trabajar más racionalmente, a ahorrar menos, se mejoró económicamente y socialmente, y, sobre todo, se empezó a modernizar todo a un ritmo frenético.

En los últimos el pueblo ha progresado muchísimo: se mejoró la carretera, se construyó el Polideportivo, se habilitó un espacio para que sirviera como Centro Social en los bajos del ayuntamiento, se hicieron los depósitos nuevos de agua, se mejoró el alumbrado público y la red de agua potable, se arreglaron las calles de Diputación, Sol y Salamanca, la Iglesia, el cementerio y el lavadero, se hizo el parque y se construyó una zona recreativa junto a la Font dels Noguerets. También se ha construido un nuevo Centro Social y una depuradora.

Hoy hay censadas unas cincuenta personas, aunque en realidad son menos los que viven todo el año allí y, casi todo, son pensionistas. El campo aún se trabaja, pero mucho menos. Los que los trabajan son los jubilados, que se resisten a dejar de trabajar en la tierra, algunos que los trabajan los fines de semana, y alguno más, que viene a trabajar las tierras desde otros pueblos. La agricultura ya no da para vivir y se vive de las pensiones principalmente. En vacaciones ,y los fines de semana, acuden los hijos del pueblo y otros forasteros, y la población aumenta de tamaño cuatro o cinco veces.

El pueblo tiene todos los servicios y comodidades. La población ha dejado de emigrar y las casas se han arreglado, el pueblo ha quedado bastante bonito y, hasta el momento, se ha salvado de los desastres urbanísticos que han sufrido otros pueblos.

Aunque algunos auguran un futuro negro para el pueblo, si pensamos que ha sobrevivido a situaciones mucho más adversas, tenemos que ser optimistas y pensar que aún queda Famorca para muchos siglos.

“Los municipios pequeños de montaña se muestran despoblados, envejecidos quedando como reducto de segundas residencias en fines de semana, épocas estivales y festivas”. (TORMO SANTONJA, Jordi)

Mª Rosario Martí Marco, en 1995, en "Estrategias de desarrollo para la zona de montaña de la Comunidad Valenciana" decía: “el labrador se ha sentido lógicamente atraído por los salarios fijos que le ofrece la actividad industrial, la construcción y los servicios derivados del turismo litoral. La reducción del espacio agrícola se halla por tanto, en directa relación con el decrecimiento demográfico y la falta de competitividad de los productos agrarios”.

"En su trabajo “El turismo rural: una alternativa para el desarrollo integrado de los municipios rurales de la Montaña alicantina” (1996), describe la zona como “un espacio en el que se ha ejercido un notable drenaje de mano de obra y una nula inversión en infraestructuras. El resultado final consiste en la incapacidad de esta área para alcanzar el “estándar” medio en la evolución socioeconómico”.

Y continúa:
"Planteamos el establecimiento de un modelo de desarrollo que, como objetivo
global, pasa necesariamente por promover el desarrollo y frenar la regresión demográfica, a cuyos efectos se plantean cuatro objetivos básicos:
— Romper el aislamiento de la comarca, sobre todo de sus zonas más deprimidas.
— Mejorar la calidad de vida de sus habitantes mediante actuaciones sobre las
infraestructuras y los equipamientos y servicios sociales.
— Desarrollar los recursos económicos disponibles, en especial los relacionados con la agricultura y el turismo.
— Proteger el patrimonio natural y cultural, compatibilizándolo con el desarrollo económico".


ESTOS ÚLTIMOS AÑOS

Lo más difícil de contar es lo que ha pasado hace poco. Un esquema de las cosas que han pasado sería el siguiente:

En los años 80 se construyó el Polideportivo y la pavimentación de todo el pueblo. También se arregló el cementerio. En los bajos del ayuntamiento se habilitó un espacio para que sirviera como Centro Social.

En los ochenta quisieron construir un vertedero de basuras para toda la comarca y, entre otros lugares, pensaron en construirlo en Famorca. Gracias al estudio geológico del terreno, no prosperó la idea. También se oye que tenían planes para hacer un cementerio de material radiactivo.

Sobre 1983 hubo una riada fuerte que destruyó el Polideportivo y hubo que reconstruirlo.

A fines de julio de 1990 hubo un violento incendio forestal que afectó a los términos municipales de Castell de Castells, Vall de Laguar, Tollos, Fageca, Vall d´Ebo, Vall d´Alcalá y Famorca, y quemó un total de 5000 hectáreas de monte bajo y pinos. En Famorca afectó a la sierra de Alfaro.

En 1993 se hizo el depósito de agua nuevo.

En 1994 se pavimentó la calle de la Diputación y se arregló el margen que da a ella.

En 1994 se hizo un nuevo muro de contención para el Polideportivo.

En 1994 se arregló el ayuntamiento y se puso un escudo de cerámica.

En 1995 hubo un gran incendio que venía de Castell de Castells y quemó gran parte de la sierra de Serrella, afectando también a los términos municipales de Beniardá, Confrides, Fageca y Famorca.

En 1996 y 1997 se mejoró el alumbrado público y se pusieron farolas nuevas.

En 1997 se hizo el parque y el lavadero nuevo.

Sobre 1998 se arregló la Font dels Noguerets y se hizo el puente de madera, convirtiendo el lugar en zona recreativa.

A fines de agosto de 1999, a causa de un rayo, hubo un pequeño incendio en la parte alta de Alfaro, dentro del término municipal de Famorca.

Sobre el año 2000 se hizo la parte de arriba de la calle Salamanca más ancha, y posteriormente se pusieron piedras en el margen y unos murales cerámicos de Mariano Tomás.

Sobre el año 2000 se arregló el lavadero, se arreglaron los márgenes del Ramal y se hizo el nuevo parque, debajo del Polideportivo. Además, se arregló un poco la iglesia y también se clausuró el vertedero de basuras que había junto als Pontets.

En el 2002 se hizo la depuradora y otro depósito de agua añadido al anterior. Está construyéndose un nuevo Centro Social y, por otra parte, en la partida de El Forá se están haciendo perforaciones para extraer agua.

También está prevista la instalación de un parque eólico sobre la sierra de Alfaro, muy cerca de la cumbre. Parte de las torres estarán en término municipal de Famorca. Aunque esto producirá energía eléctrica sin contaminación, los ecologistas de la Comunidad han protestado por la elección de esta sierra para su instalación.


ÚLTIMOS ALCALDES

Desde 1990 hasta 2015: Tomás Ortiz Baeza

De 2015 a 2019: José Vicente Masanet Ferrer

Desde 2019: Vicente Ruiz Rodíguez




NEOCOLONIZACIÓN

En los últimos años, Famorca no sólo ha tenido que luchar contra su despoblación y su falta de servicios. Famorca, al igual que otros municipios pequeños y zonas con baja densidad de población, ha pasado a ser candidata para albergar todas aquellas infraestructuras, industrias o servicios molestos e insalubres que rechazan las zonas de mayor densidad de población.

Pensaron en hacer canteras, una planta de basuras (años 80), incluso un cementerio de pararrayos radiactivos (1990), etc.

La Planta de Basuras se pretendía instalar cerca de la Font dels Olbits y el Cementerio de pararrrayos radiactivos en la Planissa, al oeste de les Rotes.







Aprovechándose de la poca densidad de población del territorio, también pensaron en poner aerogeneradores para producir electricidad.

De momento, hemos conseguido sobrevivir, pero detrás de unas ocurrencias, vendrán otras y, al final, se cargarán el pueblo.


EL PLAN EÓLICO

Desde el año 2000, en que se aprobó el Plan Eólico de la Comunidad Valenciana, existe la amenaza de que se instalen aerogeneradores en el término municipal de Famorca. Según el proyecto de 2004, se instalarían cuatro aerogeneradores en el término municipal de Famorca, a tan sólo un kilómetro de la población. En total, habría 17 aerogeneradores en la sierra de Alfaro, todos ellos visibles desde Famorca.

El proyecto consiste en instalar, en la cresta de estas sierras, 50 aerogeneradores de 100 metros de altura, a tan sólo un kilómetro de distancia de nueve de los pueblos de la comarca. Además, para la evacuación de la energía, deberían instalarse 160 torres de apoyo, de 39 metros de altura, alguna de las cuales se sitúa tan sólo a 40 metros de uno de los núcleos habitados. Todo esto generaría ruido e incomodidades y ponía en peligro el turismo de la zona y haría bajar el valor económico de las propiedades

Desde que el proyecto se expuso a información pública se creó una gran alarma social en toda la comarca, hasta el punto de haberse recogido miles de firmas en contra del proyecto y haberse presentado más de 40.000 alegaciones contra el mismo. Además, los Plenos municipales de 18 ayuntamientos de la zona dictaron acuerdos de oposición a estos Parques.

Más allá de las opiniones personales y de la necesidad de sustituir los combustibles fósiles por fuentes de energía renovable, lo discutible es la idoneidad de estas sierras para instalación de estos grandes aerogeneradores: no se había acreditado el que existiese un recurso eólico mayor que en otras zonas, no existen mayores necesidades de consumo eléctrico (no hay industria y hay poca población) y, además, la zona es de una gran importancia medioambiental (acreditada por Europa con las figuras de Lugar de Importancia Comunitaria y Zona de Especial protección para las Aves, dentro de la Red Europea Natura 2000). Y eso por no hablar del valor paisajístico de la zona, que sufriría grave deterioro con la presencia de los aerogeneradores y las líneas de evacuación eléctrica.

Una vez más, habían elegido los pueblos de esta comarca, con mínima densidad de población, para que albergasen las infraestructuras que rechazaban en otros lugares donde técnicamente sería más adecuada su ubicación.

El Síndic de Greuges, el 31 de marzo de 2005, efectuó una Recomendación al Gobierno Valenciano donde le instaba a: “Buscar otras zonas más adecuadas para albergar infraestructuras eólicas con el menor impacto ambiental posible”.

La amenaza todavía no se ha disipado del todo, aunque las probabilidades de la instalación de parques eólicos aquí es mucho menor que antes.


Recreación de laa ubicación de los parques eólicos de la comarca

Periódico Ciudad: 7 de agosto de 2004

Periódico Ciudad: 31 de julio de 2005

Información 13.04.2017



(CORTÉS SAMPER, Carlos – Población y economía rural, 2009)


La Xylella

A partir del año 2018, surgió una nueva amenaza para el futuro del pueblo.

Prácticamente la única actividad económica del pueblo está en peligro por la aparición de la plaga de la "Xylella fastidiosa" que afecta a los almendros.

Los procedimientos de lucha contra la plaga están siendo cuestionados por la mayoría de los agricultores, ya que suponen el arranque y destrucción de todos los almendros situados en un radio de cien metros del punto de localización de la plaga. Además, las indemnizaciones que se dan son muy pequeñas.




https://www.levante-emv.com/economia/2019/03/13/juez-impide-arrancar-almendros-xylella/1847622.html

Proyecto de nuevo ayuntamiento:

http://www.imaginarq.es/blog/imagen-famorca/



No hay comentarios:

Publicar un comentario